1. La metáfora moderna de la máquina para pensar a la naturaleza. Suficiencia e insuficiencia de la analogía. La relación naturaleza-arte como guía de la reflexión. La idea de naturaleza como arte natural.

2. La idea de organismo y de organización. Órgano a diferencia de instrumento. La contraposición entre fuerza motriz e impulso formador. Mecánica y Técnica de la naturaleza.

3. “... es absurdo para los hombres el concebir o esperar siquiera que algún día pueda levantarse un Newton que llegue a hacer concebible la producción de tan sólo una brizna de hierba según leyes de la naturaleza no ordenadas por una intención.” KU, AA 05:400. El ser vivo ¿una máquina de vivir? Referencia a algunos pensadores modernos y su influencia en el pensamiento de Kant.

4. “Yo soy todo lo que es, lo que fue y lo que será y mi velo no lo ha levantado aún ningún mortal” (KU § 49). La naturaleza ¿libro escrito en caracteres matemáticos y/o libro cifrado? El carácter formador-modelador de la técnica: el paso de la metáfora de la máquina a su configurante realidad efectiva.

Partimos de una constatación que realiza Kant, y es que para explicar la estructura interna de los seres organizados no alcanza el recurso de pensarlos sólo como máquinas de vivir. Aun cuando la explicación mecánica no pueda ser abandonada ¿en qué relación está con la organización interna de los seres vivientes y, por ellos, con la naturaleza en su conjunto pensada como un todo organizado?

Se trata de pensar a la naturaleza como un sistema orgánico, esto es una integración de todos sus productos como si fueran miembros de un cuerpo u organismo, de modo tal que las partes de ese sistema ya no sean pensadas como partes de una máquina sino como órganos capaces de autoformación, a la vez que contribuyen a la configuración, conservación y regeneración del todo.

El concepto de técnica de la naturaleza o de naturaleza como arte, que está en la base de toda la Crítica de la facultad de juzgar, nos servirá de guía. Este indica la idea de un arte natural o “ars naturae”. Kant usa alternativamente la contraposición naturaleza-arte: la naturaleza en oposición al arte en cuanto arte mecánico y la naturaleza en afinidad con el arte, o sea en su poder productivo como fuerza formadora (bildende Kraft). El engendrar, la regeneración y la autoconservación son manifestaciones de ese arte natural. Estos rasgos característicos, del ser organizado muestran la diferencia entre un agregado mecánico de partes –la máquina–, y un sistema orgánico.

Si bien la metáfora de la máquina no es completamente desechada, un examen de la misma puede contribuir a pensar la relación entre la naturaleza como mecanismo y la naturaleza como sistema orgánico, ambas representaciones vigentes y en disputa durante la modernidad y, también, puede contribuir a problematizar la encarnadura de la máquina en nuestro mundo, esto es, ver el pasaje de la metáfora moderna a su realización efectiva como cuerpo vital propio.