Introducción

El problema de la llamada (Ruf/Appel) constituye uno de los puntos centrales de la fenomenología contemporánea. Desde las formulaciones originarias de Jean-Louis Chrétien en L´appel et la réponse (1992), hasta las formulaciones ofrecidas por Jean-Luc Marion en Reduction et donation(1989) y Étant donné (1997), la llamada ha abierto un espacio fenomenológico de reflexión caracterizado por la tematización de diversos fenómenos del orden de lo invisible. Desafiando el sentido de fenómeno tradicional como aquello que (a) aparece como objeto y que (b) se circunscribe al campo de lo visible, la llamada irrumpe como un cuestionamiento radical a estos dos supuestos fundamentos del pensamiento filosófico.

Habiendo ofrecido una primera aproximación frente al problema de la llamada y el correspondiente carácter indeterminado del “quién” de dicha apelación, Heidegger retoma un tópico fundamental del pensamiento occidental: la “culpa” (Schuld). Sin embargo, la novedad aquí no estriba en el abordaje de dicho concepto, sino más bien en (a) su relación con la noción de “conciencia” (Gewissen) en su acepción estrictamente ético-moral[1] y (b) el tratamiento de este segundo término en un contexto de completo rechazo a la dualidad sujeto-objeto que se desprende de toda fenomenología reflexiva de la conciencia (Husserl).

Yendo al primer momento de este entramado conceptual, Heidegger aborda la noción de culpa a partir de la estructura “ser deudor” (Schuldigsein). Con esto, Heidegger pretende, de modo cercano a Nietzsche,[2] mostrar la íntima conexión entre “culpa” y “deuda”. De este modo, Heidegger ubica a dicho existenciario como un modo fundamental del ser del Dasein, y a su vez, nos pone frente a una negatividad. Y esto porque el Dasein, en tanto “ser deudor”, se define por una suerte de “no ser”, aunque no en un sentido privativo.

En segundo lugar, la conciencia es definida como la llamada de la Sorge, corriéndose así el eje de su comprensión estrictamente gnoseológica. Y aún más, tampoco podemos concebir la conciencia en el terreno ético-moral como una suerte de aparecer del “remordimiento” (Böses Gewissen) o “tranquilidad de la conciencia” (Gutes Gewissen) del que nace por medio de la culpa. Puesto que la conciencia, lejos de aparecer como una voz o indicador que aplica correctivos por la vía de la culpa, debemos concebirla, según Heidegger, como un volver a la facticidad de la existencia y sus horizontes comprensivos. La exégesis fenomenológica de la conciencia pretende elucidar el “poder-ser” inherente a la llamada/vocación que ubica al Daseinen un estado de interpelado frente a una instancia ambigua que lo antecede y a la vez es su posibilidad más propia.

Con esto, Heidegger pretende ofrecer una exégesis de la “conciencia” en una instancia previa a cualquier tipo de construcción teórica de la misma, y de un modo peculiar, encuentra en el concepto de culpa como “ser deudor” un hilo conductor para llevar a cabo dicha tarea. Ante esto, nos preguntaremos de modo provocativo si acaso (aunque siempre de modo elusivo) no nos encontramos frente a un elemento originariamente ético en la fenomenología heideggeriana.

Contenidos

En virtud de lo señalado, las clases se organizarán del siguiente modo:

Primer encuentro: “El llamado/vocación y el ‘ser deudor’: ¿una reflexión ética en Sein und Zeit?” (§58).

Segundo encuentro: “Repensar la conciencia desde su fuente ética: la conciencia (Gewissen) y su originaria negatividad fenomenológica” (§58).

Tercer encuentro: “Entre ‘remordimiento’ (Böses Gewissen) y ‘tranquilidad de la conciencia’ (Gutes Gewissen): una exégesis de la conciencia por fuera de su sesgo moderno” (§59).

Cuarto encuentro: “El llamado al ‘poder ser sí mismo’: génesis del ‘estado de resuelto’ (Entschlossenheit)” (§60).

Propósitos

● Propiciar una comprensión de la fenomenología heideggeriana a la luz de los conceptos de “conciencia”, “culpa” y “voz”.

● Promover el estudio de las fuentes a partir de una tarea dialógica de discusión.

● Auspiciar un clima para el intercambio de ideas de modo grupal.

● Estimular la propensión del vínculo dialógico con la filosofía marcada por la apertura de la discusión en conjunto con los estudiantes y el profesor.

Objetivos

Que los estudiantes puedan:

● Establecer una relación problemática con los textos fuentes.

● Fomentar una perspectiva crítica de los conceptos a abordar.

Bibliografía primaria

En esta ocasión, nos serviremos de la traducción ofrecida por José Gaos. Con todo, la traducción de Jorge Rivera también puede utilizarse. Ambas versiones serán contrastadas en diversos momentos del curso. A continuación, adjuntamos las fuentes bibliográficas:

● Heidegger, M. (1967), Sein und Zeit, Tübingen, Max Niemeyer Verlag.

● ----------------. (2007), El ser y el tiempo, Buenos Aires, FCE, pp. 304-328.

● ----------------. (2009), Ser y tiempo, Madrid, Trotta.

Bibliografía secundaria

De carácter orientativo y no obligatorio, y con el fin de invitar a profundizar las fuentes de los conceptos heideggerianos de “culpa” y “conciencia”, dejamos consignada una bibliografía mínima sobre este tema:

● Nietzsche, F. (2008), La genealogía de la moral, Madrid, Alianza, pp. 75-124.

[1] Como es sabido, el término en alemán empleado por la fenomenología para habla de “conciencia” es Bewusstsein.

[2] Nietzsche, F. (2008), La genealogía de la moral, Madrid, Alianza, pp. 75-124.